Nombres Romanos

A diferencia de en otras culturas, los nombres romanos se otorgaban una vez que hubieran pasado ocho días desde el nacimiento (en niñas), y hasta 9 nueve días después en varones. El día en que recibían el nombre se llamaba diez lustricus, y, antes de recibirlo, el padre lo legitimaba. Básicamente era un procedimiento que consistía en una determinada ceremonia de altar.

Una vez que hubieran sido purificados, los niños recibían lo que se conocía como el pranomen (el equivalente a lo que para nosotros sería el nombre de pila) que coincidiría con el que tenían sus antepasados.
Lo cierto es que hoy en día prácticamente ya no se utilizan los nombres romanos como tal; y es que, con el paso de los años, han sido cambiando, llegando hasta el punto de que muchos de los hombres no se parecen demasiado al original.

En cualquier caso, estamos hablando de nombres que están cargados de poder, por lo que suponen una interesante manera de obsequiar a nuestros hijos con ellos. Además, cada uno de ellos dispone de un significado que está esperando a que lo puedas descubrir.

Diferentes nombres romanos que te va a gustar leer.

Nombres Africanos Nombres Alemanes Nombres Americanos
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